Búscame y me vas a encontrar

5 September 2013

Hunger Games

En la película Juegos del Hambre, basada en una novela con el mismo nombre, se presenta una realidad distópica que se centra en el país Panem, que está dividido en 12 distritos y un Capitolio, donde viven los más ricos de esa sociedad. Cada distrito tiene una especialización y la diferencia de clases es muy marcada. Cada año, se elige de cada distrito a un hombre y a una mujer entre los 12 y 18 años como tributos para enfrentarse en un programa de televisión llamado Juegos del Hambre.


En el juego, todos los participantes son arrojados a una arena controlada secretamente por el Capitolio. Tienen que enfrentarse uno con otro y a las condiciones de vida en la arena. El objetivo es tratar de sobrevivir, el ganador es el jugador que al final de 2 semanas logre sobrevivir.
A pesar de ser una situación ficticia, hay en ella reflejos de la sociedad actual. Las personas poderosas de la sociedad que presentan, viven en un plano completamente utilitarista, ven a los participantes del juego como objetos de diversión. Una trágica diversión, en donde los obligan a recurrir a aspectos primitivos de supervivencia y donde terminan matándose unos a otros.


El Capitolio es la sede del gobierno, sus habitantes viven en un mundo completamente banal, donde las mayores preocupaciones son la moda y el entretenimiento. Viven rodeados de lujos y su mundo es completamente tecnológico, la comida no les hace falta, al contrario están rodeados de espléndidos banquetes, sin una verdadera conciencia de la desigualdad entre los distritos. El distrito más pobre es el número 12, en el cual los habitantes son quienes se especializan en minería y viven en muy malas condiciones y apenas tienen que comer.


¿Qué tan alejados estamos actualmente de ésta ficción, si en nuestra realidad las diferencias sociales están terriblemente marcadas? Creo que muchas veces nos olvidamos de ello, vemos nuestro alrededor y no siempre recordamos que hay personas como nosotros que incluso no tienen que comer.

Dejamos pasar por alto las diferencias y nos dejamos absorber por mercadotecnia y consumismo. Nos olvidamos de nuestro verdadero valor como personas y de lo que realmente nos hace crecer como mejores seres humanos. Somos dueños de nuestras acciones y juntos formamos la sociedad en que vivimos, si dejamos que otros decidan por nosotros o nos manejen como títeres, perdemos nuestra autoposesión, degradando nuestra dignidad.
 
Si todas nuestras acciones y las enseñanzas que transmitimos se basaran en amor y respeto, podría darse un cambio en el mundo. No se puede descartar el hecho de que por nuestra condición de seres humanos cometemos errores, pero tampoco podemos basar nuestra vida en esa premisa, ya que nuestro crecimiento como personas sería pequeño o inclusive inexistente. Si no respetamos la vida de otros seres humanos, sin importar sus condiciones o incluso la de nosotros mismos nos volvemos vulnerables. Con lo anterior me refiero a que si no defendemos el valor de la vida, todo en contra de ella puede llegar a dominar nuestra opinión y pensamiento.



Al olvidarnos del valor de las personas es como olvidarnos de nuestro propio valor. Es utópico pensar en un mundo lleno de amor donde todos nos respetemos, pero creo que es mejor perseguir ideales que se basan en este tipo de utopías a ir tras realidades que pueden caer en la mediocridad y eventualmente nos lleven a potencializar nuestros defectos como sociedad.
Me resulta muy complejo pensar en la forma en que los bienes en el mundo sean distribuidos de una forma justa. Para lograrlo o mejorar las condiciones de diferencias sociales tan marcadas hay que buscar el bien del prójimo.

Otro destello de realidad que se puede observar dentro de la película, es como los medios de comunicación han perdido valores éticos por motivos puramente económicos. Sólo pocos pueden controlar estos medios y son principalmente quienes tienen el poder dentro de la sociedad. En la película, esto sucede de forma más exagerada. Pero deja ver el poder que tienen los medios sobre la humanidad y como está enfocado para el beneficio de pocos. Se observa cómo los ricos y poderosos juegan con quienes viven en condiciones más bajas a las suyas. Los pobres son entonces como títeres de los ricos y por miedo, cumplen con lo que se les pide que hagan.


Durante la película esperé un momento de intensa rebelión que nunca llegó. Los personajes principales son los dos jóvenes que pertenecen al distrito más pobre y son los últimos sobrevivientes en el juego. Sobreviven porque así se diseñó el juego. La libertad que tienen dentro de la arena es un engaño y al final el antepenúltimo sobreviviente se da cuenta de ello y muere sabiendo que no tenía oportunidad de vivir. En nuestra sociedad podríamos aterrizar ésta situación y cuestionarnos, que tanto actuamos por convicciones propias y que tanto lo hacemos por que nos dejamos manipular por otros.


Al final la protagonista descifra inteligentemente, que el juego perdería su significado si no hay ganadores. Ambos participantes deciden suicidarse al mismo tiempo, como señal de rebelión contra el Capitolio, pero son detenidos porque el gobierno prefiere tener a dos ganadores que a ninguno.
La película se centra en temas negativos como la desigualdad, la deshumanización, el abuso, la ambición, el materialismo, entre otros. Pero muestra destellos de esperanza por medio del amor, el respeto, la solidaridad, la amistad y otros más. Creo que hoy en día a los seres humanos nos falta incluir principalmente el amor y el respeto en nuestra vida. Quizá los medios de comunicación son responsables de no promover valores, o el uso de las redes sociales ha enfriado nuestras relaciones con otros.


Podemos buscar mil y un culpables, pero la razón por la que me parece que el mundo sufre en muchos aspectos es el ego. El ego que hace que nos envolvamos en nosotros mismos y nos olvidemos de los demás, este ego se puede sumar al de otros y formar uno aún mayor. Pero hay forma de contrarrestarlo, cada quien es dueño de sí mismo y puede buscar ser mejor poco a poco. Debemos aprender a vivir el aquí y el ahora, el ego se centra mucho en el pasado y el futuro, pasamos el tiempo reviviendo momentos pasados, o tratamos de controlar el futuro. Todos tenemos el potencial de ser mejores cada día, pero hay que darnos cuenta de ello y aprender a amar a los demás. 
No he leído los libros, pero espero que la siguiente película me sorprenda...


recomendación musical: Safe and Sound - Taylor Swift

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